martes, 26 de febrero de 2013

Lo que los compradores no quieren ver cuando visitan tu casa


Fuente de la Noticia Idealista.com
Los agentes inmobiliarios recorren tantas viviendas como sea posible con el objetivo de conocer toda la oferta disponible. En muchas ocasiones, los agentes se preguntan si los propietarios de las viviendas que acaban de enseñar a posibles compradores sabían que había programada una visita. en este sentido, los agentes indican que hay que evitar que los posibles compradores vean durante la visita a la vivienda juguetes, mascotas o platos sucios
Mascotas: los potenciales compradores no quieren ver ni a las mascotas de los actuales dueños ni los juguetes de los animales. cuando alguien quiere vender su casa no es necesario que los posibles interesados en comprar sepan que ahí han vivido animales.

Niños: algo similar a las mascotas ocurre con los juguetes de los niños porque puede transmitir a los futuros propietarios que la vivienda no está ordenada y limpia.

Platos sucios en el fregadero: si durante la visita los interesados ven los platos y cubertería sucia y aplica en el fregadero transmite una imagen negativa de la vivienda.

El baño: presentar un cuarto de baño limpio y sin objetos personales de los actuales inquilinos ayuda a transmitir una sensación de limpieza en el baño como si fuese la primera vez que se usa.











lunes, 11 de febrero de 2013


MI PRIMER AÑO.

Hoy hace un año que trabajo en la mejor oficina de todo el país, mi oficina. Aún recuerdo ese 8 de Febrero de 2012 cuando de prisa y corriendo fui a la Cámara de Comercio a darme de alta, y a la oficina a firmar mi contrato. Cuando salí de allí me sentí alguien importante, no sólo tenía un contrato si no que era autónomo y tenía un gran trabajo. 


Recuerdo mi primera recarga de Enero, donde me había metido y quien era toda esa gente tan rara…ahora soy uno de ellos. Luego llegaron los cursos de formación en el Metropole y sus facturas de parking. Mis primeras llamadas de captación con Lara en la nuevísima oficina de Telde ( ya no me ofusco cuando me dicen que no…jiji) Mi primera visita con Rosa Delia, y la segunda, la cual fue mi primera exclusiva., que día más bonito aquel… Mi primera guardia en la que no paró de entrar gente, menos mal que estaba Vero para echarme una mano, mi primera convención nacional en Lanzarote, alguien me puede decir como estaba el agua de la piscina?? Los repartos en los centros comerciales, en los que aprendí que tengo compañeros ninja, eh Leonor… Los repartos de los martes y sus tintas. Como olvidar a mis clientes especiales, esos que entran en la oficina por entrar, y que parece que siempre me tocan a mi… recordemos al cubano. La firma de los herederos, colgamos el cartel de aforo completo en la puerta de la oficina… Mi primera venta. Los clientes difíciles que terminan aceptándome. La condición suspensiva…buffff. El terreno de Teror que casi hace que pierda mi coche… Los cabreos, las alegrías…

En fin, como para escribir un libro.

Después de que naciera mi hijo, este ha sido mi mejor año, he aprendido muchas cosas, he conocido a mucha gente, he evolucionado como persona y sé cuáles son las cosas a las que hay que dar importancia realmente. Es el mejor trabajo que hubiera podido tener, me gusta el ambiente, el poder trabajar en casa las 24 horas y poder ocuparme de mi familia, conocer gente nueva y tener muchas “circunstancias”. Conducir a sitios nuevos, poder ayudar.

Gracias a todos mis compañeros, en especial a Rosa Delia y Leomo, son un gran apoyo aunque hablen muuucho. A Amalia y a Daniel por su ayuda. A Vero por estar siempre conmigo en las guardias y por los buenos ratos. A Lara por su compañía desde el principio, sus cursos, sus respuestas, sus consejos. A Jose Vicente porque siempre tiene la respuesta, y a Rafa por su ayuda, comprensión y asesoramiento, eso sí, no me gusta que termines convenciéndome de que tienes la razón, me da mucha rabia. Jiji.

Gracias también a todos los agentes que han trabajado conmigo, a los que he tenido la oportunidad de conocer, y a los que no, deciros que tengo unas propiedades estupendas….

Ya ha pasado mi primer año, vamos a por el segundo.


viernes, 8 de febrero de 2013

5 errores a evitar si vendes tu casa



La actual situación del mercado inmobiliario español hace que vender una vivienda no sea una tarea fácil. El grifo de la financiación está casi cerrado, los precios bajan de forma constante, pero todavía no se sabe cuándo tocarán suelo, los compradores que disponen de liquidez son conscientes de su capacidad negociadora y la gran oferta de inmuebles en venta hace que destacar sobre el resto sea ciertamente complicado.
No obstante, se siguen vendiendo y comprando viviendas. Para formar parte de ese porcentaje, los propietarios tienen que volcarse más que nunca con la labor de venta.

Entre otras cosas, deben evitar caer en cinco errores comunes a la hora de vender una casa:


No tomarse en serio al primer interesado
La mayoría de las veces, el primer interesado en comprar la vivienda es el mejor comprador. En general, el comprador potencial que hace la primera oferta está muy dispuesto a hacer negocios. La primera oferta tal vez pueda ser más baja de lo que al vendedor le gustaría, pero para eso están las negociaciones.
Muchos vendedores toman la decisión de esperar a que lleguen mejores ofertas, pero cuando muchos inmuebles pasan demasiado tiempo en el mercado es porque el propietario no se tomó suficientemente en serio aquella primera oferta que recibió. A estas alturas, aquel posible comprador ya ha adquirido otra vivienda.



No arreglar pequeñas averías
¿Grifos que gotean? ¿Una ventana que no cierra bien? ¿Alguna cañería que desprende olores? Antes de poner a la venta una casa hay que hacer una pequeña inversión en tiempo y dinero para hacer que la vivienda esté completamente libre de estas pequeñas molestias.



Los compradores también son personas ocupadas y no quieren encontrarse en la situación de tener que acometer pequeñas reformas o tareas de mantenimiento tras comprar una vivienda. Al contrario, lo que harán al detectar estos fallos será hacer una oferta económica inferior y pedir al propietario que corra con los gastos.



En lugar de llegar a una situación así, es recomendable invertir un poco de dinero por adelantado o hacer el trabajo uno mismo para solventar estos pequeños problemas. La casa se venderá más rápido y lo más probable es que el vendedor recupere la inversión realizada e incluso más. En otras palabras: una visita de 300 euros de un fontanero o un electricista puede evitar una oferta económica del comprador 3.000 euros menor.



Hacer cambios muy personales en la vivienda
En muchas ocasiones, los propietarios de una vivienda caen en la tentación de redecorar o reformar su casa para que refleje sus gustos más personales y particulares. Cuando se ha decidido que esa casa es en la que se va a vivir para siempre estas decisiones son perfectas, pero cuando no se sabe si se va a querer vender el inmueble en el futuro, entonces es una de las peores decisiones que se puden tomar. En ningún sitio está escrito que nuestros gustos sean los gustos de los posibles compradores de nuestra vivienda, más bien suele ocurrir todo lo contrario.
Por lo tanto, hay que pensar muy cuidadosamente acerca de cualquier reforma de la vivienda antes de venderla. La mayoría de los compradores esperan darle un toque personal a la casa tras comprarla, mejor que no lo hagamos por ellos.



Poner un precio demasiado alto
Con una situación como la actual,  poner un precio demasiado alto no es una estrategia acertada para atraer personas interesadas en nuestra vivienda. Los compradores actuales están bien informados y conocen la situación y los precios de mercado de los barrios en los que buscan una vivienda. Con un precio muy elevado, la vivienda en cuestión está condenada a permanecer mucho tiempo en el mercado, alejando a posibles interesados, que pueden pensar que si está tanto tiempo sin venderse "por algo será".
Además, hay que tener en cuenta que con un mercado en el que los precios no dejan de bajar, es probable que muchos propietarios que tienen sus viviendas a la venta se vean obligados a bajar un poco más los precios de salida, aunque estos no estén por encima de la media del mercado.
Si el precio está ajustado desde el principio, las probabilidades de vender son mucho más altas que si se puso un precio muy alto que se va reduciendo poco a poco en sucesivas revisiones.



No tener suficiente visibilidad
En un mercado con poco movimiento como el actual, una gran mayoría de los posibles compradores de vivienda pasan mucho tiempo buscando buenas ofertas online. Si la casa en venta tiene un precio adecuado y suficiente visibilidad online, las oportunidades de venderla son mayores que si nos dedicamos a enseñarla a los interesados tan sólo algunas horas al día y ciertos días a la semana.
Un vendedor interesado en vender su casa de la forma más rápida posible tiene que darle al inmueble toda la visibilidad posible. Y esto significa combinar todas las opciones, que por supuesto no son excluyentes. Mostrar la vivienda en portales especializados tiene que combinarse con aceptar todas las visitas físicas que sea posible. No estar disponible para enseñar la casa en muchas ocasiones emite un mensaje negativo a los compradores.
Además, hay que estar siempre listo para enseñar la casa y que ésta siempre esté preparada para recibir la visita de posibles compradores.
Los mercados cambian y los compradores y vendedores tienen que adaptarse a estos cambios. En un momento de gran dificultad para el mercado inmobiliario hay que estar atento de no cometer estos errores habituales.