La factura de la luz
incluye hasta diciembre un incremento por la refacturación eléctrica.
Habrán
notado que la factura de la luz ha subido en los últimos meses, parte del incremento
se debe a un nuevo concepto: la refacturación de la
electricidad consumida en el último trimestre de 2011 y el primero de 2012. Esto supone que hay que pagar más
ahora para compensar un fallo del tribunal supremo a favor de las eléctricas
que denunciaron al gobierno por fijar en este periodo un precio
de la luz demasiado bajo.
Si
eres el dueño de la vivienda está claro quién paga este extra, pero ¿y si eres
un inquilino recién llegado al piso? dichos inquilinos se encuentran
con una factura superior a su consumo actual
por un concepto que tienen obligación de pagar aunque el gasto
eléctrico lo realizara el anterior habitante de la vivienda.
La
refacturación.
Una
parte de lo que se paga cada mes en la factura de la luz viene fijado por el
gobierno a través de los llamados “peajes de acceso”. Los anteriores gobiernos
aprobaron durante el último trimestre de 2011 y el primero de 2012 una tarifa
inferior a lo que debería de haber sido, según denunciaron en
su momento las eléctricas. pese a la denuncia, las facturas de la luz durante
esos seis meses se siguieron cobrando según la tarifa fijada por el gobierno
hasta que el tribunal supremo emitió su sentencia a favor de estas empresas y
se aprobó la norma que recoge el proceso de refacturación (orden iet 843/2012, de 25 de abril de 2012). la consecuencia es que a partir de agosto y hasta
diciembre de este año, los clientes deberán pagar la diferencia entre el precio fijado inicialmente y
el que tendría que haber sido en esos seis meses.
De esta manera, todos los clientes que
consumieron electricidad entre octubre de 2011 y marzo de 2012 (excepto los
clientes del bono social) están recibiendo una carta junto a su factura
eléctrica en la que se les informa de este recargo, que tendrán que pagar hasta
diciembre (ya que el recargo se fracciona en varias facturas para reducir su
impacto)
¿Cuánto
hay que pagar?
La
refacturación no afecta igual a todos los consumidores, ya que depende
del consumo realizado en el periodo y de la potencia contratada en el
último trimestre de 2011 y primero de 2012. sobre este “recargo” aplicará el
iva del 18%, tipo vigente hasta marzo de 2012. en total, la refacturación puede
suponer entre 50 y 100 euros por hogar,
según cálculos del sector.
¿Y
si compré o alquilé el piso a partir de abril de 2012?
Para
quien haya comprado o alquilado una vivienda a partir de abril de este año,
todo depende de si el contrato de la
luz es nuevo o no. si al entrar en la casa se ha dado de alta
un nuevo contrato, el consumidor estará exento de la refacturación, explican
desde la asociación española de la industria eléctrica (unesa). pero esto no es
lo normal, ya que cuando se compra o alquila un piso y para evitar el
coste asociado a dar de alta un nuevo contrato, es
muy habitual subrogarse en el contrato anterior de la vivienda
En
este caso, el nuevo propietario o inquilino tendrá que pagar el consumo no
facturado. desde unesa se
recuerda que en una subrogación “el
nuevo propietario hereda los derechos y obligaciones del contrato anterior,
entre lo que figura en este caso la refactuación. la alternativa es la firma de
un nuevo contrato, que es lo que debe hacerse cuando cambia el titular del
suministro”, sentencian desde la patronal del sector.
Una
práctica habitual en el caso de los alquileres es que el contrato de
electricidad se mantiene a nombre del propietario, quien pasa el cobro al inquilino de lo que indica la factura.
en estos casos en los que el contrato está a nombre del propietario del
inmueble, la factura a partir de agosto ya incluye la refacturación, aunque el
inquilino actual haya entrado en la casa después de abril. Desde UNESA se
reconoce que en estos casos la refacturación de los nuevos inquilinos no está
asociada a su consumo, "pero eso forma parte de
los términos del contrato que suscriban propietario-inquilino"
Fuentes
del sector eléctrico recomiendan a los nuevos inquilinos que se encuentren en
esta situación que revisen la factura para acordar
con el casero quién debe pagar el recargo. no obstante, recuerdan
a los inquilinos que se trata de un importe reducido y que no
deben sentirse damnificados porque
durante los dos trimestres que se refacturan ahora "probablemente vivieron
en una vivienda en la que pagaron de luz menos de lo que
deberían haber pagado por el mismo motivo que
ahora obliga a refacturar".